La filatelia, el apasionante mundo de la colección de sellos postales, nos permite explorar innumerables tesoros históricos y culturales. En esta ocasión, nos adentramos en la historia de los primeros sellos postales triangulares de Sudáfrica, datados en el año 1853, conocidos con cariño como "Lady Hope".
Estos sellos postales no solo son emblemáticos por su diseño único, sino también por su intrigante historia. La leyenda que rodea a estos sellos postales triangulares es tan fascinante como ellos mismos y por eso son tan demandados en el mundo de la filatelia.
En aquel entonces, el gobernador de la colonia africana buscaba una solución para la creciente demanda postal en la región. Fue entonces cuando surgió la idea de crear una serie de estampas distintivas, las Lady Hope, con una forma triangular para evitar cualquier confusión con los sellos postales del Reino Unido. Este diseño singular fue concebido con la clara intención de que no pasaran desapercibidos para nadie y hoy son joyas del coleccionismo.
Los sellos postales Lady Hope de Sudáfrica son famosos entre los coleccionistas por su representación gráfica de una mujer recostada sobre rocas con el lema "Cabo de Buena Esperanza". La compañía Perkins, Bacon & Company fue la encargada de emitir esta serie histórica, compuesta por dos valores: el sello de un penique en color rojo y el de cuatro peniques en tono azul.
Por su importancia histórica y el particular diseño hoy son demandados por los coleccionistas.
Un viaje al pasado
Estas estampas no solo son piezas de colección, sino también ventanas al pasado de Sudáfrica y a un momento crucial en su historia postal. Su diseño inusual, la leyenda que las rodea y su condición de auténticos tesoros filatélicos las convierten en objetos de deseo para coleccionistas e historiadores.