Terelu Campos ha regresado a los platós televisivos después de la partida de su madre, la emblemática María Teresa Campos, y en su última aparición en "La plaza de La 1", compartió un episodio de su infancia que había guardado con celo y que ha dejado una huella profunda en su vida.
Con una sinceridad abrumadora, Terelu Campos insinuó que, a diferencia de lo que muchos podrían pensar, ser la hija de una estrella del calibre de María Teresa no siempre resultó beneficioso para su desarrollo. De hecho, la colaboradora dejó entrever que siempre sintió un gran peso al ser la heredera de una figura tan pública como la Campos.
Para ilustrar su punto, la famosa rememoró sus años escolares, recordando que en su instituto no se usaban uniformes. Sin embargo, expresó que habría preferido que existiera un uniforme, ya que esto la habría librado de la constante presión de ser "la mejor vestida" y "la mejor limpia".
"Yo he sufrido eso".
"Yo he sufrido eso, si yo hubiera tenido un uniforme no habría sufrido eso jamás en mi vida", continuó, haciendo referencia a la presión social que sentía por parte de su entorno. Todas las miradas se centraban en su apariencia, algo que angustiaba profundamente a la popular Terelu Campos.
Tras las sombra de una madre famosa
A primera vista, esta anécdota podría parecer trivial. Sin embargo, revela las expectativas y las tensiones a las que a menudo se enfrentan los hijos de figuras famosas. El nepotismo puede tener sus beneficios, pero también su lado oscuro, algo que Terelu Campos ha demostrado con su habitual carisma.