María Teresa Campos perdió la vida esta semana y Gustavo, su chófer y confidente, habló con la prensa sobra la mujer para la que trabajó por tanto tiempo. De hecho, el hombre estuvo al lado de la emblemática presentadora desde sus 18 años.
Sin vacilar y con total sinceridad, Gustavo dejó claro: "Estoy muy triste, se ha ido mi media naranja". Lo cierto es que toda España llora a María Teresa Campos, en especial sus dos hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego.
"Es la número 1, creo que no habrá nadie como ella nunca. Nadie pisaba un plató como ella", continuó Gustavo no sin acotar ante los periodistas que llegaron al tanatorio donde se han incinerado los restos de María Teresa Campos: "Solo quiero decir de ella que ha dignificado esta profesión vuestra como nadie".
"Estoy muy triste, se ha ido mi media naranja".
En ese marco, añadió que la animadora supo ser "la mujer más generosa del mundo, conmigo y con todos vosotros". "Nunca se negaba a una foto o a hacer nada que pudiera ayudar a los demás. Hasta el final. Para ella la tele era su mundo", añadió tal y como recoge "La Vanguardia".
Muy emocionado
Para cerrar, Gustavo agradeció las muestras de cariño del público para la icónica María Teresa Campos: "Yo quiero agradecer a toda la gente que ha venido. Porque ayer se vio lo que era ella. Ella era muy consciente de lo que le quería su público".