La filatelia, el arte de coleccionar sellos postales, ha cautivado a entusiastas y coleccionistas de todo el mundo durante décadas. En España, esta pasión por los sellos ha llevado a la búsqueda de auténticos tesoros numismáticos que han alcanzado valores impresionantes en el mercado.
Entre estos sellos postales, destacan tres que cuentan historias fascinantes y cuyo valor va más allá de su papel y tinta. Este sello, que forma parte de la segunda emisión de sellos postales de España en 1851, es un verdadero tesoro para los coleccionistas.
Su singularidad radica en un error de impresión en el color, cuando un cliché de dos reales fue accidentalmente insertado en la placa de impresión de los sellos de seis reales. Este error, aparentemente insignificante, lo convierte en una auténtica rareza. En 1996, el mundo de la filatelia se sorprendió cuando un ejemplar de este sello de error de color azul de dos reales fue vendido por la asombrosa suma de 19.000 euros.
Otro de los sellos postales que ha cautivado a los coleccionistas es el sello rosa pálido de dos reales emitido en 1852. Este sello presenta la imagen de la reina Isabel II junto con la inscripción "Correos 1852" y fue utilizado exclusivamente en el correo internacional con Portugal. Su limitada circulación y su atractivo diseño lo han convertido en un objeto codiciado para los amantes del coleccionismo.
Estos son dos de los sellos postales más caros de la filatelia.
Asombroso valor
En 2012, un ejemplar de estos sellos postales fue subastado por la impresionante cifra de 6.986 euros, demostrando el valor que los coleccionistas están dispuestos a pagar por piezas únicas y significativas en la historia postal de España.