Fue en 1946 cuando el Banco Nacional de Hungría emitió el billete de 100 florines, con un tamaño de 158 por 72 milímetros y un diseño memorable, el cual, por cierto, no pasa inadvertido en encuentros numismáticos.
El billete, desmonetizado a inicios de 1951, presenta en su anverso la imagen de Gizella Várszegy, habiendo sido grabado por Tokés János. La serie destaca por sus característicos tonos azulados y verdosos.
El reverso del billete, por su parte, enseña dos manos sosteniendo espigas de trigo y un martillo; elementos que dotan a la pieza de un dramatismo único, una de las tantas razones por las que esta serie cautiva a coleccionistas nacionales e internacionales.
Un ejemplar del billete se vendió en septiembre último, según reporta "Numista", a través de la casa subastadora Katz Auctions por 112 dólares, es decir, alrededor de 102 euros. En otros espacios, el billete puede alcanzar precios mucho más altos.
En una famosa plataforma de compra y venta, se ofrece otro ejemplar por 4.500 dólares, o sea, poco más de 4.000 euros. Sin duda, una oferta que resultará de lo más atractiva para muchos aficionados a este tipo de objetos de colección.
Si te gustó nuestro contenido, puedes seguirnos en Google News y en nuestro Canal de WhatsApp, eso nos ayuda a seguir generando contenido gratuito a nuestros lectores. ¡Muchas gracias!