Entre 1957 y 1958 se emitió en Francia un muy buscado billete de 5.000 francos que, pese a haber sido desmonetizado en 1960, continúa presente en la mente de los aficionados a la numismática.
El billete mide 160 por 85 milímetros y, en su anverso, muestra un retrato de Enrique IV. Al fondo se aprecia una panorámica que incluye el Pont Neuf. La belleza de la pieza es indiscutible.
El diseñador del billete fue Jean Lefeuvre, según reporta "Numista". En el reverso, se vuelve a ver un retrato del mencionado monarca junto al Castillo de Pau y una vista de los Pirineos.
La citada fuente numismática señala que se emitieron alrededor de 100.000 ejemplares de este billete, el cual ha pasado por distintas subastas en los últimos años. En marzo pasado, se vendió un ejemplar por 205 dólares a través de Katz Auctions.
En eBay se busca que otro ejemplar de este billete alcance un precio considerablemente más elevado: 2.850 dólares, es decir, unos 2.700 euros. La pieza, por cierto, data de 1957.
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