Marta Riesco dejó atrás su traumática ruptura con Antonio David Flores. Pasó mucho tiempo ya de eso y la colaboradora pudo rehacer su vida, tanto desde el plano laboral, como desde el plano sentimental, con una nueva pareja.
Sin embargo, el destino quiso que Marta Riesco vuelva a estar ligada a su expareja. En esta ocasión, se trata de un encargo laboral lo que ha la llevado a Málaga, ciudad donde ha convivido con el productor. Sucede que “Ni que fuéramos” ha mandado a su reportera estrella a dicha ciudad para presentar un nuevo reportaje de investigación.
Lo vivido por la colaboradora con Antonio David es de público conocimiento, por esta razón, sus compañeros no han ocultado lo incómodo que podría resultar esta situación para ella. “¿Qué se siente volver a Málaga?”, le consultó María Patiño, tratando de indagar las sensaciones de su colega al regresar a un lugar que no le trae muy buenos recuerdos.
Ante este escenario, lejos de lo que muchos podrían imaginar, Marta Riesco ha vuelto a dar una muestra de personalidad y superación con una revelación que sorprendió a varios. "La verdad, lo único que he pensado es que quería hacer un buen trabajo. A mí me da igual, Málaga, Malagueta o Malagón”, ha expresado la colaboradora.
“A mí me da igual, Málaga, Malagueta o Malagón”.
Profesional
Marta Riesco se ha enfocado en el trabajo y ha sido eso lo que la ha llevado a encarar esta visita a Málaga de una manera totalmente laboral. “Quiero trabajar, ser profesional y tengo la suerte de que me ha querido acompañar Alejandro (su pareja actual) porque estos días no tenía concierto. ¿Qué más puedo pedir?", ha sentenciado.
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