Ana Obregón ha transformado su vida por completo hace ya casi un año, desde que la pequeña Ana Sandra ha llegado a su vida. Ella es su nieta biológica, hija de Aless Lequio, de quien se ha hecho cargo desde el momento que llegó al mundo.
Ana Obregón ha tenido que soportar numerosas críticas desde que se supo la noticia, sobre todo por el tratamiento al que ha acudido en Estados Unidos para el nacimiento de la menor. Sin embargo, la ex de Alessandro Lequio no duda en mostrarse totalmente feliz con ella.
De hecho, Obregón utiliza sus redes sociales para mostrar el día a día junto a la pequeña y no ha ocultado lo mucho que le ha cambiado la vida, confesando aquello que dejó a todos impactados. “Ani, cumplimos 11 las dos, porque contigo volví a nacer”, ha comentado en un posteo de Instagram en alusión a un nuevo mes de vida de la pequeña.
“Ani, cumplimos 11 las dos, porque contigo volví a nacer”.
Ana Obregón deja a la vista lo mucho que significó la llegada de la menor a su vida. “¿Cómo es posible que las lágrimas puedan llegar a ser de tanta tristeza y tanta felicidad juntas?”, se ha preguntado. Y es que las sensaciones son encontradas para la modelo. Por un lado, celebra la vida tras la llegada de su nieta, pero padece por la ausencia de su hijo, quien partió hace ya casi cuatro años.
Recuerdo intacto
Sin embargo, Ana Obregón tiene el recuerdo intacto de su hijo y ese sentimiento se lo transmite desde ya a su nieta. “No puedo dejar de pensar lo que daría tu papá por abrazarte y morderte los mofletes como lo hago yo cada segundo. Pero está aquí con nosotras y soplaremos tu tarta de biberones con él esta noche, cuando durmamos los tres juntos”, completó.
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