La especialista en mindfulness, Belén Colomina, nos guía en una sesión de meditación para gestionar los momentos de enfado e ira que podemos tener en estos días revueltos. Con varios consejos y una rutina, todo puede cambiar.
La ira, a menudo vinculada al conflicto y a sentirnos abrumados por la rabia, puede ser manejada de forma constructiva con el ejercicio de la meditación, una técnica que puede controlar nuestras emociones para que no sean perjudiciales ni negativas.
Y es que estas emociones nos alertan de que algo está ocurriendo y necesitamos expresarlo para satisfacer nuestras necesidades. En este punto, podemos optar por canalizar de manera útil y constructiva o dejarnos llevar por la reactividad impulsiva, generando aún más malestar.
En la meditación guiada, puede descubrir cómo canalizar la ira a través de la relajación en un camino hacia una vida más equilibrada y serena. La práctica del mindfulness nos brinda herramientas para gestionar los momentos de enojo y frustración de manera constructiva.
Un ejercicio para todas las edades.
Tomando varias clases puedes aprender a reconocer la ira como una emoción válida y comprender su mensaje subyacente, podemos abordarla desde la calma del momento presente, transformando su energía en una fuerza positiva para el crecimiento personal.
Más detalles y ventajas
La meditación nos invita a observar la ira con amabilidad y comprensión, permitiéndonos explorar su origen y entender nuestras necesidades subyacentes.
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