La numismática española se encuentra en efervescencia tras el lanzamiento de una moneda de plata de ley 925, elaborada por la prestigiosa Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT), la cual ha capturado la atención de coleccionistas y aficionados por igual.
Con un peso de 18 gramos y un diámetro de 33 milímetros, esta moneda, con un valor facial de 30 euros, ha sido distribuida a través del Banco de España por encargo del rey, convirtiéndose en un verdadero hito en la numismática española.
Su diseño, una obra maestra que fusiona historia y literatura, presenta en su reverso una escena icónica del clásico relato de "El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha", con don Quijote y Sancho Panza montados en el legendario caballo Clavileño. Este diseño, elaborado con la tipografía Ibarra Real, que data de la edición de la obra en 1780, evoca la riqueza cultural y literaria de España.
Hay una gran cantidad de coleccionistas que ambicionan sumar esta pieza en su colección.
Además, en un círculo en la moneda se aprecia un molino de viento con las aspas en cuatro posiciones distintas, añadiendo un toque de dinamismo y movimiento a la pieza. Se trata de una verdadera obra de arte en miniatura, que no solo representa la historia de España, sino también la creatividad y habilidad de los artesanos de la FNMT, por lo que los coleccionistas darían todo por tener este ejemplar en su colección.
Momento histórico
La importancia de esta moneda no se limita solo a su diseño y características físicas, sino que también marca un momento histórico en la acuñación de monedas en el país. Es la primera con la efigie del rey Felipe VI y la reina Letizia, lo que la convierte en un objeto de interés y admiración en el ámbito de la numismática española.
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