La receta de fabada asturiana es ideal para los fanáticos de la cocina ibérica; es un auténtico tesoro culinario de Asturias que se erige como uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía española. Desde tiempos inmemoriales, esta deliciosa preparación ha cautivado los paladares más exigentes con su exquisita combinación de ingredientes y su proceso de cocción lento y meticuloso.
Empecemos por los protagonistas de esta obra maestra culinaria: las fabas asturianas, una variedad de judía grande, blanca, larga y aplanada, que se entremezclan durante la cocción con trozos de morcilla asturiana, chorizo de la misma región y suculentos trozos de cerdo. La cebolla y el ajo, generosamente empleados, aportan su aroma y sabor característicos a esta maravillosa receta de fabada asturiana.
¡A cocinar!
Para recrear esta experiencia gastronómica en toda su plenitud, necesitarás aproximadamente 200 gramos de tocino, 2 unidades de morcilla y 2 de chorizo, un diente (o más, según preferencia) de ajo, 250 gramos de cebolla, 450 gramos de fabas y opcionalmente unos 100 gramos de lacón gallego.
El proceso de preparación de la receta de fabada asturiana, aunque requiere tiempo y paciencia, no es excesivamente complicado. Comienza remojando las fabas durante al menos 24 horas, asegurándote de que estén bien hidratadas antes de comenzar la cocción. Luego, colócalas en una olla con agua a fuego lento y deja que las fabas se cocinen lentamente durante varias horas, absorbiendo lentamente los sabores de los demás ingredientes.
Mientras las fabas comienzan a ablandarse, añade el ajo y la cebolla, y rocía la preparación con un buen chorro de aceite de oliva para aportar un toque de distinción. Cubre la olla y espera a que empiece a hervir; en ese momento, vierte un vaso de agua fría para detener la cocción y, una vez que vuelva a hevir, repite el proceso.
Mientras tanto, en otra olla, hierve las carnes mencionadas durante al menos 15 minutos para eliminar parte de su grasa. Una vez listas, añádelas a la olla con las fabas y continúa cocinando a fuego lento (sin olvidar agragar con generosidad sal, pimienta, ají molido y un poco de cúrcuma para darle un color especial a la preparación) hasta que todos los sabores se fusionen a la perfección, lo cual llevará alrededor de tres horas. La espera valdrá la pena, ya que esta receta de fabada asturiana jamás decepciona.
Para finalizar, algunos sugieren que no hay mejor manera de realzar el sabor de la fabulosa fabada asturiana que con un toque de cilantro y perejil fresco. ¡Una auténtica delicia para los sentidos que te transportará directamente a los sabores y aromas de Asturias!
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