Limpiar tu ordenador regularmente es superimportante. Y es que no se trata solo de hacer que luzca bonita por fuera, sino de mantenerla funcionando bien por dentro.
Si tu ordenador o PC acumula polvo, puede calentarse demasiado y eso puede hacer que funcione más lento, por eso es clave realizar un mantenimiento periódico, tanto así como es posible para no perder ningún componente que pueda estropearla.
Y es que si no la limpias, por ejemplo durante cinco años, puedes descubrir grasas de polvo por cualquier sitio del ordenador, tanto fuera como por dentro. Por eso, el polvo es uno de los principales problemas que dañan el PC.
Tan solo limpiarla regularmente, como cada tres a seis meses, puede ayudar a evitar esos problemas. Lo que debes hacer es, primero, apagar el PC y desenchufar el cable de alimentación. Es importante para tu seguridad. Luego, asegúrate de hacerlo en un lugar bien ventilado para que el polvo no vuelva a acumularse tan rápido.
Cuida el PC por su gran valor.
A continuación, limpia el exterior del ordenador con un paño húmedo y luego usa aire comprimido para quitar el polvo del interior, especialmente de los filtros y las partes más difíciles de alcanzar.
Más recomendaciones
Si te sientes valiente, puedes sacar los componentes para limpiarlos mejor. Pero asegúrate de organizar los cables antes de volver a armar todo para que el aire pueda circular correctamente dentro del PC.
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