En la mayoría de las cocinas, el fregadero de acero inoxidable es de los más utilizados, pero con el paso del tiempo puede dañarse. Sin embargo, con este sencillo truco, recuperarás su brillo y podrás eliminar las manchas y ralladuras que pueden ser difíciles.
Con el tiempo, nuestro fregadero puede verse afectado y acumular manchas de agua sucia, residuos de alimentos, grasas y aceites, lo que hace que el acero pierda su brillo original y se vea opaco.
Aunque no lo puedas creer, la harina es recomendable y un aliado efectivo para poder recuperar el brillo de tu fregadero y eliminar lo opaco. Además, no es costoso y tampoco requiere productos químicos agresivos.
La harina es un aliado recomendable y no es costosa.
Paso a paso
Antes de limpiar tu fregadero, limpiarla bien con agua caliente y jabón. Luego, colocar la harina en toda su superficie. Dejarla actuar de 5 a 10 minutos. Después que pase el tiempo. puedes frotando suavemente toda la superficie ealizando movimientos circulares (sin ejercer demasiada presión).
Como siguiente paso, enjuaga el fregadero con agua caliente para eliminar la harina y cualquier residuo de suciedad, y por último utiliza un paño seco para sacar el resto.
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