El "Penny Black español" es mucho más que un simple sello postal; es una joya histórica que marcó un hito en el mundo de la filatelia. Emitido en el año 1850 durante el reinado de la reina Isabel II, este sello se distingue por ser el primero de su tipo en España y pionero en el mundo al ser autoadhesivo.
Este sello postal representa un momento crucial en la historia del correo y la comunicación. Su emisión durante el reinado de Isabel II lo convierte en un testimonio de la época y un símbolo de los avances en el sistema postal español. Su apodo, el "Penny Black español", hace referencia al famoso sello británico, destacando su importancia y singularidad entre los coleccionistas.
Debido a su gran valor histórico y monetario, es fundamental verificar la autenticidad del "Penny Black español". La consulta con expertos en filatelia y la adquisición de sellos certificados garantizan la legitimidad de la pieza. Además, el estado de conservación juega un papel crucial en su valoración, por lo que es importante preservarlo adecuadamente.
Este es uno de los sellos más caros del mundo.
Para mantener su valor y belleza intactos, es esencial cuidar el "Penny Black español" correctamente. Alejarlo de la luz solar directa, la humedad y el polvo ayuda a prevenir daños y deterioro. El uso de fundas protectoras proporciona una capa adicional de seguridad, asegurando la preservación a largo plazo de esta pieza histórica en el mundo del coleccionismo.
Valor
La escasez y la alta demanda de este sello postal lo convierten en un objeto codiciado en el mercado filatélico. En subastas especializadas, se han registrado ventas impresionantes que han superado los 100.000 euros, lo que refleja su estatus como un tesoro filatélico del siglo XIX.
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