Es habitual que con el paso del tiempo y uso, nuestras ollas se quemen y deterioren. Pero con este sencillo truco y con sencillos ingredientes que tendrías en tu hogar, podrás recuperarlas y dejarlas impecables.
Si bien hay productos de limpieza tradicionales para limpiar nuestras ollas, existen otras alternativas para esta situación. Para esto, solamente vas a necesitar vinagre blanco y bicarbonato de sodio.
El vinagre blanco se convirtió en un gran aliado para la limpieza, gracias a sus propiedades desinfectantes y desengrasantes. Por el lado del bicarbonato de sodio, ayuda a neutralizar olores, disolver la grasa y la suciedad, suavizar el agua y su seguridad ambiental. Con estos ingredientes, dejarás tus ollas como nuevas.
Necesitarás mitades iguales de vinagre blanco y bicarbonato de socio.
Paso a paso
En primer lugar, para limpiar nuestras ollas, se debe disolver el bicarbonato de sodio en vinagre blanco. Revolver bien para que ambos ingredientes se integren. Una vez hecho, colocar la mezcla en las paredes y base de la olla.
Como siguiente paso dejarla actuar entre 10 y 20 minutos, si las manchas continúan puedes utilizar una esponja metálica para sacarlas. Puedes repetir varias veces el proceso hasta que estas manchas desaparezcan.
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