Si tienes una camiseta vieja que ya no usas pero no quieres desechar, no te preocupes. En esta nota te enseñaremos cómo transformar esa camiseta en un hermoso vestido con solo unos simples pasos y materiales básicos. Saca tu máquina de coser y prepárate para darle una segunda vida a esa prenda olvidada en tu armario.
Antes de comenzar, asegúrate de tener a mano una camiseta vieja y un rectángulo de tela. Este último puede ser obtenido de una falda u otra tela que ya no necesites. Es importante calcular el ancho del rectángulo dejando espacio para fruncir y dobladillos, asegurando que coincida con el contorno de la camiseta.
Para evitar que la tela se deshilache, remata los dos lados del rectángulo con un zigzag y realiza un dobladillo en la parte inferior. Luego, frunce la parte que se unirá a la prenda haciendo dos costuras en el borde. Ajusta la máquina de coser a la puntada más larga y la tensión al mínimo para que la tela se frunza adecuadamente.
Una vez fruncido, mide el contorno de la camiseta vieja y asegúrate de que coincida con el de la falda. Haz un nudo en los hilos sobrantes para fijar el fruncido. Luego, cose una goma elástica en el centro de las dos costuras de fruncido para mayor elasticidad.
De esta manera, le darás una segunda vida a esa prenda que considerabas perdida.
Finalización del vestido
Encuentra el centro de la camiseta vieja y la falda, y únelos con alfileres. Haz lo mismo con los laterales y la parte posterior. Finalmente, cose las dos prendas juntas, utilizando hilo del mismo color que la camiseta para que la costura sea discreta. ¡Y listo! Ahora tienes un nuevo vestido creado a partir de una camiseta vieja y un rectángulo de tela reciclada.
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