En el fascinante mundo de la filatelia, ciertos sellos postales destacan no solo por su diseño o rareza, sino por errores de impresión que los convierten en auténticas joyas codiciadas por coleccionistas de todo el mundo.
Entre los sellos postales destacados, el sello sueco amarillo de Treskilling es famoso por un error de impresión que lo hizo ser impreso en color amarillo en lugar del tradicional verde. Descubierto por el filatelista Georg Wilhelm Baeckman en 1885, este sello fue vendido en 1886 por siete coronas a un comerciante de arte. En 2013, el Conde Gustaf Douglas adquirió este tesoro filatélico por un precio no revelado, aunque su venta anterior alcanzó los 2,6 millones de dólares.
Otro sello valorado por un error de color es el sello Siciliano del año 1859. Este tesoro postal debía ser amarillo pero fue impreso en azul. Su excelente estado de conservación a lo largo de los años también contribuye a su valor en el mercado del coleccionismo.
En 2011, este sello fue vendido por 2,6 millones de dólares a un coleccionista estadounidense, consolidándose como una pieza codiciada por los coleccionistas. Pero estos no son los únicos sellos postales valiosos dentro del mercado filatélico.
Por un ejemplar de estos, los coleccionistas pagan hasta 2,6 millones de dólares.
Otro ejemplar valioso
La lista de sellos postales valiosos se completa con el “Todo el país es rojo” de 1968. Representando la revolución política de Mao Tse Tung en China, este sello comunista presenta un grupo de ciudadanos con el pequeño libro rojo, símbolo del comunismo de Mao. Este sello contiene un error de diseño al dejar en blanco la isla de Taiwán por lo que hoy está valuado en hasta dos millones de dólares gracias a la filatelia.
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