Los cepillos de dientes, después de cada uso, pueden comenzar a acumular bacterias concentradas en la boca, por lo que resulta aconsejable desinfectarlos con la mayor regularidad posible. Afortunadamente, existen varios productos que tienes a mano que ayudarán en esta tarea.
Desinfectar los cepillos de dientes es indispensable para eliminar esos microorganismos que pueden causar infecciones bucales. Una manera eficaz de hacerlo es utilizando vinagre blanco, principalmente, porque posee propiedades antimicrobianas debido a que contiene ácido acético.
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El ácido acético del vinagre blanco tiene la capacidad de eliminar los virus y hongos que suelen acumularse en los cepillos de dientes después de su uso. Para desinfectarlos con este producto, solo tienes que sumergir los cepillos en una mezcla de agua y vinagre blanco. Déjalos remojando por unos minutos y luego enjuágalos para el siguiente uso.
Otra opción para desinfectar los cepillos de dientes es el agua oxigenada, puesto que actúa como oxidante, reaccionando ante los microorganismos no deseados y eliminándolos por completo. Sumado a esto, el agua oxigenada (peróxido de hidrógeno) también ayudará a eliminar los malos olores adheridos al elemento de higiene bucal. Remoja tus cepillos en esta solución por unos instantes y ¡listo!
También se sugiere, con el fin de desinfectarlos, sumergir los cepillos de dientes en enjuagues bucales que posean propiedades desinfectantes. Es decir, que contengan agentes antimicrobianos como clorhexidina o cloruro de cetilpiridinio. Verás que esta fórmula hará maravillas en este proceso de higienización, el cual te lo agradecerá.
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