Mantener el hogar limpio y ordenado es importante para el bienestar físico y mental de las personas que lo habitan. Un entorno adecuado reduce el estrés y la ansiedad, pero, además, contribuye a un ambiente más saludable. Las alfombras, en particular, requieren atención especial en el mantenimiento y limpieza, por lo que en esta ocasión mencionaremos algunos consejos que sí funcionan para recuperar su aspecto.
Un ingrediente esencial para aflojar la suciedad de las alfombras es el bicarbonato de sodio. Se recomienda espolvorear este elemento sobre el tapete y dejarlo reposar durante al menos 15 minutos o, en lo posible, toda la noche. Se trata de un método infalible para quitar manchas y absorber olores persistentes.
El vinagre blanco es un truco esencial para las manchas difíciles de las alfombras. Para esto, es necesario mezclar partes iguales de vinagre y agua en una botella con atomizador. Luego se debe rociar la solución sobre la zona afectada y dejarla actuar durante algunos minutos. Con un paño limpio, secaremos el excedente hasta descomponer las marcas sin dañar las fibras del tapiz.
Un secreto ideal para los chicles pegados en las alfombras es el hielo. Este truco permite endurecer el chicle y, una vez que esté sólido por completo, se aconseja utilizar una cuchara para rasparlo cuidadosamente. Los restos que pueden quedar, se pueden retirar con una pequeña cantidad de vinagre blanco.
"Se aconseja utilizar una cuchara para rasparlo cuidadosamente".
Cepillado regular
El cuidado y mantenimiento de las alfombras debe hacerse de manera regular para evitar la acumulación de suciedad. Además de aspirar, se aconseja cepillar el tapete con un cepillo de cerdas duras, lo cual ayuda a levantar los residuos atrapados en la fibra.
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