Este viernes ha sido un día más que especial para Enrique Ponce ya que luego de meses de retiro de la vida pública ha reaparecido en un rodeo en la plaza de toros para la Feria de Pentecostés de Nimes, donde Ana Soria ha sido una de las espectadoras de lujo.
Claramente Ana Soria no lo pasada del todo bien cada vez que Enrique Ponce sale a la arena para torear, ya que se le ponen los pelos de punta de los nervios, pero lo cierto es que también ha pasado una jornada más que feliz tanto con el torero como con su familia.
Ana Soria estuvo acompañada por sus padres y su hermano, quienes han visto de primera mano una actuación excelente de Enrique Ponce. “Se me acelera el pulso cuando pienso en lo poquito que queda para verte brillar de nuevo", había escrito la joven unas horas antes.
Tras su faena, Enrique Ponce le ha tirado la montera a Ana Soria a modo de ofrenda, y ella le ha correspondido lanzándole un beso delante de todos los espectadores, cerrando así una jornada de lo más especial para ambos.
Comienza la despedida
Cabe recordar que Enrique Ponce anunció su retirada de los rodeos en el 2021, pero finalmente la despedida se dará en este 2024. Ahora se espera verle en Sevilla y en la Feria de Madrid, aunque previsiblemente se cortará la coleta el 9 de octubre en su casa, Valencia.
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