El agua de rosas es un buen uso para el cuidado de la piel y además, proporciona una delicada, suave y frescura de fragancia. A su vez, aprovecha para favorecer tu bienestar. Este producto puede comprarse en farmacias, tiendas cosméticas o puedes hacerlo en tu hogar con este truco casero.
Entre los beneficios del agua de rosas, se encuentran: Limpiar, tonificar y humectar la piel. Descongestiona las zonas casadas, como ojeras y bolsas. Combate el envejecimiento cutáneo. Relaja el cuerpo, reduce la caída del cabello y a su vez, alivia dolores de cabeza y migraña.
¿Cómo se realiza?
Para la realización del agua de rosas caseros, necesitarás los siguientes ingredientes: 500 g de pétalos de rosas frescas, medio litro de agua destilada, una cacerola con tapa y frascos de cristal con cierre hermético.
Ya puedes comenzar con la preparación del agua de rosas. Debes seleccionar los pétalos. Hay que tener en cuenta que los que mejor fragancia aportan son los rojos y los rosas (además, que estén libres de suciedad). Usar una cacerola, el agua destilada y los pétalos seleccionados y prender el fuego.
Los pétalos que mejor fragancia aportan son los rojos y los rosas.
Poner el fuego a temperatura alta y, cuando esté hirviendo, empezar a bajarlo. Es importante estar atento, ya que en este paso, se extraen esos aceites esenciales de las rosas, tapa la olla y déjalo así unos 10 minutos. Una vez pasado el tiempo, deja que repose 60 minutos. Luego filtra el contenido para retirar los pétalos para poder quedarte únicamente con el líquido obtenido: el agua de rosas. Pasar a un vaso hermético y dejar enfriar hasta el día siguiente.
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