Las patatas son un alimento básico en muchas cocinas por su resistencia, precio accesible y durabilidad. Sin embargo, cuando desarrollan brotes y raíces, su apariencia cambia y surgen dudas sobre su seguridad.
Aquí, os explicaremos si es seguro comer patatas germinadas y cómo prevenir su brotación, para así cuidar la salud de uno y de los más queridos.
Las patatas brotan cuando se almacenan en ambientes cálidos y húmedos. Por esto, la temperatura ideal para este proceso ronda los 20 grados. A través de varios estudios, se mencionó que el calor de muchos hogares puede hacer que estas se activen aún más en primavera.
La principal preocupación al consumir patatas germinadas es la presencia de glicoalcaloides. Estos compuestos químicos, que aumentan a medida que estas se brotan, pueden ser tóxicos en altas concentraciones. Ahora, si estas tienen brotes pequeños y la raíz está firme y sin arrugas, generalmente es seguro consumirlas después de cortar los brotes.
Ten cuidado y sigue estos consejos.
No obstante, si los brotes miden más de dos centímetros o la patata está arrugada y blanda, es mejor desecharla o usarla para compost.
Más detalles
Puedes prevenir esto guardándolas en un almacenamiento fresco y seco, que eviten la luz solar y que estén separadas de otros vegetales.
Si te gustó nuestro contenido, puedes seguirnos en Google News y en nuestro Canal de WhatsApp, eso nos ayuda a seguir generando contenido gratuito a nuestros lectores. ¡Muchas gracias!