Cada vez más personas están utilizando linaza en grano para confeccionar sus propias mascarillas faciales. A continuación, te explicamos los pasos a seguir para preparar este tratamiento que hará maravillas con tu piel.
Pero antes de eso, es importante conocer algunas de las grandes cualidades de la linaza para tu piel: en primer lugar, ayuda a evitar enrojecimientos y reduce inflamaciones epidérmicas. Además, mantiene la piel hidratada gracias a sus ácidos grasos omega 3.
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Además de lo mencionado, la linaza tiene la capacidad de eliminar células sin vida de la piel, por lo que es considerada un excelente exfoliante de tratamiento suave. Dicho esto, pasemos a la preparación: coloca 3 cucharadas de linaza en grano en una olla y añade 3 vasos de agua.
Enciende el fuego y deja que hierva. Puedes agregar una rama de canela a la preparación, ya que no solo le dará un mejor aroma, sino que también tiene propiedades antimicrobianas y ayuda a mejorar la circulación, dotando a la piel de una apariencia insuperable.
Una vez que haya hervido, deja la preparación a fuego lento durante unos 10 minutos. Después de ese tiempo, cuela bien la mezcla. Así obtendrás una sustancia viscosa que será tu mejor aliada para el cuidado de tu piel, dejándola radiante y súper hidratada. Aplícala con cuidado y deja que actúe por al menos 15 minutos: repite el proceso las veces que consideres necesario y, de a poco, comenzarás a ver los resultados.
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