La deshidratación corporal ocurre cuando el cuerpo pierde más líquidos de los que ingiere, lo que puede afectar su funcionamiento normal. Es que el agua es fundamental para muchas funciones del cuerpo como la regulación de la temperatura, la eliminación de desechos y el funcionamiento en general.
Para evitar la deshidratación, es importante conocer las señales más importantes. En primer lugar, la sed es la manera con la que el cuerpo indica que necesita más agua. Sentir la boca seca es uno de los primeros síntomas en aparecer e indica que el cuerpo está comenzando a deshidratarse.
La deshidratación también puede provocar una disminución del volumen sanguíneo, lo que reduce la cantidad de oxígeno y nutrientes. Esto puede causar fatiga, debilidad y mareos, síntomas claves que podrían indicar que tu cuerpo necesita hidratarse.
Además, la deshidratación puede causar confusión y problemas de concentración. La falta de agua en el organismo afecta la función cerebral, lo que puede llevar a la dificultad para concentrarse y problemas de memoria.
La falta de agua en el organismo afecta la función cerebral.
Piel seca y elasticidad reducida
La deshidratación también puede producir la sequedad de la piel y una elasticidad reducida. Cuando la piel no vuelve rápidamente a su lugar cuando se pellizca ligeramente puede ser un signo clave. Esta es una manera de comprobar la falta de agua en el cuerpo.
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