En los últimos años, el mercado de coleccionistas ha puesto la mira en las monedas de céntimos antiguas de España, que han demostrado tener un valor mucho mayor al que se les atribuía originalmente.
Estas monedas, que parecen ser simples objetos de uso cotidiano, se han convertido en auténticas piezas de colección, y algunos ejemplares alcanzan precios sorprendentemente altos.
“La vanguardia” publica que una de las monedas más codiciadas es el céntimo de 1938. Este ejemplar, que presenta la figura de una mujer con corona, se ha llegado a vender por más de 3,000 euros. Su escasez y el contexto histórico en el que fue emitido son factores que elevan su precio en el mercado de coleccionistas.
Una de las monedas más codiciadas es el céntimo de 1938.
Otro ejemplo es el céntimo de 1949, conocido por su diseño del escudo nacional. Esta moneda, que en condiciones óptimas puede costar hasta 800 euros, ha atraído la atención de muchos para la numismática. Su rareza, dado que se produjeron pocas unidades, ha convertido a este céntimo en una joya en el mundo de la colección.
Creciente demanda de céntimos
Las monedas de 5 céntimos de 1945 también son altamente valorados. Con un tiraje muy limitado, algunas ejemplares llegan a alcanzar precios de hasta 1.500 euros. La creciente demanda por estas monedas ha motivado a muchos a buscar en sus alcancías y cajones viejos en busca de este tesoro escondido.
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