En el fascinante mundo de la numismática, algunos billetes, a pesar de tener un valor nominal bajo, pueden alcanzar cifras sorprendentes en el mercado de coleccionistas. Un ejemplo es el billete de 1 dólar emitido en 1917, cuya rareza y diseño lo convierten en una pieza extremadamente valiosa para los entusiastas de la moneda.
Este billete, emitido por la Compañía Colombiana de Billetes (CBNC), se distingue por la ausencia de características modernas de seguridad, como marcas de agua o hilos de seguridad, lo que resalta su autenticidad y antigüedad, destacándose en el mundo de la numismática.
En el anverso, una impactante combinación de colores rojo y negro enmarca un retrato central de George Washington, creando un diseño visualmente impresionante y distintivo. En tanto que el reverso, conocido coloquialmente como "greenback" por su característico color verde, presenta un intrincado diseño de fondo de seguridad con múltiples rosetas decorativas. Todos estos detalles le añaden más valor en el ámbito del coleccionismo.
El valor "UNO" aparece en los laterales, mientras que el centro del billete alberga un gran rosetón que contiene el texto "Estados Unidos de América" en mayúsculas, asemejando un caballete, de ahí su apodo de "reverso del caballete". Rarezas como estas, hacen que sea un billete añorado entre los coleccionistas.
Esta pieza cuenta con numerosas rarezas que lo hacen particularmente codiciado.
Valor
Según Coin Value Look Up, un billete de estos puede venderse por cifras que oscilan entre 125 y 400 dólares si se encuentran en condiciones finas. Sin embargo, para aquellos ejemplares que han permanecido sin circular y que conservan una calidad de gema, los precios pueden dispararse, llegando a alcanzar entre 4.000 y 10.000 dólares.
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