En el universo del coleccionismo, existen monedas que pasaron de ser simples medios de pago a auténticas joyas valoradas en millones de euros. Si bien muchas son desconocidas por el público general, los verdaderos aficionados conocen la fortuna que esconden detrás de su pequeño tamaño, encapsulando historias fascinantes.
Las monedas más caras del mundo se destacan por su rareza, su estado de conservación y, en algunos casos, por errores de acuñación que las hacen únicas. Además, algunos ejemplares deben su valor a la historia que cuentan o a los momentos cruciales en los que fueron acuñadas.
Una de las monedas más valiosas del mercado es el llamado “Centén de Felipe III”. Es una moneda de oro y de un tamaño considerable, con un peso aproximado de 339 gramos. Según el sitio web “Onda cero”, esta pieza “fue acuñada en Segovia y se trata una moneda única y sin circular. En 2009 su precio fue de un millón de euros, por lo que, en la actualidad, se estima que podría duplicar su valor.
En segundo lugar, encontramos las monedas de 20 excelentes. Se trata de unos ejemplares acuñados durante el reinado de los Reyes Católicos, por lo que los coleccionistas no dejan de buscar una de estas piezas. Dependiendo de su estado de conservación, esta moneda puede alcanzar los 600.000 euros.
"Fueron acuñados durante el reinado de los Reyes Católicos".
Ceca de Segovia
Entre las monedas más valiosas y codiciadas por los aficionados, también podemos mencionar la ceca de Segovia. “El atractivo de las Onzas de oro de Luis I se debe a que son monedas que estuvieron muy poco tiempo en circulación, ya que el reinado de este monarca español solo duró 229 días”, indicó el medio citado y señaló que su precio ronda los 300.000 euros.
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