Fue durante mucho tiempo que se creyó que el pan era la mejor fuente de nutrientes esenciales para la alimentación diaria, sobre todo de carbohidratos. Con el tiempo, surgieron muchas alternativas que fueron dejando de lado esta idea.
En este punto, el amaranto se presenta como una alternativa en la alimentación rica en proteínas de alta calidad, fibra y minerales como ser el calcio, el hierro y el magnesio. Esto se distinguió en un estudio fechado en 2013 y realizado por la International Journal of Food Sciences and Nutrition.
A su vez, se reconoce que el amaranto tiene propiedades antiinflamatorias que lo hacen beneficios para quienes padecen procesos inflamatorios. En añadidura, su versatilidad le permite estar presente en una larga lista de preparaciones.
Entre los beneficios que esta semilla puede darle al organismo está la promoción de la ganancia de masa muscular gracias a su alto contenido de proteínas de buena calidad. También tiene una gran capacidad en la prevención de enfermedades como la osteoporosis, promueve la pérdida de peso y fortalece el sistema inmunológico.
Puede darle al organismo está la promoción de la ganancia de masa muscular gracias a su alto contenido de proteínas.
¿Cómo incluirla?
Según indican los expertos, incluir el amaranto en la alimentación es muy fácil. Puede añadirse en batidos, yogures, ensaladas de frutas o mezclarse en cereales para el desayuno. Asimismo, también sirve como alternativa a la harina de trigo en algunas preparaciones, ideal para quienes buscan opciones sin gluten.
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