Muchas personas alrededor del mundo reconocen al desayuno como la comida más importante del día. Por ende, es vital incluir en él alimentos que nos otorguen una mayor energía para encarar con fuerzas toda la jornada.
Luego del ayuno nocturno, el organismo necesita de nutrientes para volver a activarse. Es por este motivo que el desayuno cobra importancia en la generación de energía para el buen rendimiento físico y mental durante el resto del día.
En este sentido, los nutricionistas recomiendan un desayuno que combine proteínas, carbohidratos complejos, grasas saludables, vitaminas, fibra y minerales. Los huevos, yogur, queso, frutos secos, pan integral, avena, frutas, entre otros, son los más recomendables.
Asimismo, una semilla como el sésamo se destaca como una buena opción para el desayuno. Su versatilidad le permite ser parte de diferentes preparaciones. Es una excelente fuente de fibra, ácidos grasos y antioxidantes que favorecen la digestión y prolongan la sensación de saciedad, manteniendo estables los niveles de energía durante la jornada.
Favorecen la digestión y prolongan la sensación de saciedad, manteniendo estables los niveles de energía durante la jornada.
Grandes beneficios
Las grasas saludables presentes en el sésamo protegen el sistema cardiovascular y sus antioxidantes ayudan a regular el colesterol para estabilizar los niveles de azúcar en sangre. A su vez, también tiene aportes beneficiosos para el cerebro.
Para aprovechar sus nutrientes, es importante se las puede moler, remojar durante unas horas para ablandar la cáscara o tostados para potencias su sabor.
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