La franquicia de "A todo gas" ha asombrado a propios y extraños en las últimas décadas. En 2001, la primera película de Vin Diesel como un intrépido corredor de carreras callejeras obtuvo la buena opinión del público. Pero, a su vez, pocos esperaban que 21 años después estén preparando la décima entrega de esta historia.
En las últimas horas, un lamento llegó al correo de Vin Diesel. El actor ha afirmado en varias oportunidades que su gran sueño es cerrar esta franquicia con la película número 10. Para ello, tenía de la mano a un director bastante conocido, pero tuvo que dejarlo ir.
Justin Lin, el cineasta taiwanés, ha dirigido cinco de los nueve largometrajes de acción que se conocen de "A todo gas". Estaba todo dado para que haga lo propio con la última entrega, pero las diferencias creativas con Vin Diesel y el resto del equipo precipitaron su salida del proyecto.
Las diferencias creativas con Vin Diesel y el resto del equipo precipitaron su salida del proyecto.
Esto generará un alto costo para el título. De acuerdo a lo informado por "Variety", cada día de retraso le costará a Universal Pictures entre 600.000 y 1.000.000 de dólares por día. Un verdadero temblor corporativo que ha llevado a los directivos a salir en la búsqueda apresurada de un cineasta acorde a lo que quieren los productores.
Un anticipo del final
A lo largo de esta semana, Vin Diesel había compartido un vídeo en donde se lo podía ver filmándose y haciendo chistes junto a Justin Lin. Los usuarios notaron que el director estaba muy incómodo por la situación. Esto fue un anticipo de lo que se concretaría en los días posteriores a la publicación de ese material.