Los glaciares siempre han sido una parte fundamental para mantener el equilibrio de nuestro ecosistema. Lo cierto es que los investigadores siguen de cerca su evolución ante el avance del cambio climático. Aquí entra en juego el llamado “glaciar del fin del mundo”, situado en la Antártida.
De acuerdo a un estudio reciente, esta masa de hielo está derritiéndose con fuerza. Lo que representa una advertencia para la humanidad. En análisis de los glaciares se está haciendo a través de un robot que mide cerca de cuatro metros y se pudo introducir bajo la línea de la grieta. Así pudieron ver que el hielo sobresale por primera vez sobre el mar.
Según explica Paul Cutler, director del programa Thwaites de la Fundación Nacional de Ciencias, “una de las consecuencias de esa fractura es que potencialmente acelera la desaparición general de esa plataforma de hielo”. A su vez, el experto destacó que no todas las noticias son malas al respecto.
La última exploración de los glaciares de la mano de Icefin, nombre con el que bautizaron al robot, arrojó que pudo bajar hasta 587 metros de profundidad. De este modo, pudieron constatar que la situación no es tan grave como parecía, ya que el hielo se derrite mucho más lento de lo esperado.
¿Qué se sabe del “glaciar del fin del mundo”?
El Thwaites, tal como se lo denomina, tiene grandes particularidades con respecto a otros glaciares. Su tamaño es una de ellas debido a que tiene una longitud similar al estado de Florida. Al mismo tiempo, constituye una plataforma de hielo, esencial para el sistema con el que se regenera y funciona el glaciar.
Esencial para el sistema con el que se regenera y funciona el glaciar.
El papel de esta plataforma es actuar como un corcho. Ese mismo tiene el objetivo de retener al glaciar sobre la tierra y proporciona una defensa contra el aumento del nivel del mar. El aviso de los científicos sobre las consecuencias del cambio climático no es nuevo y esto se pone en evidencia con el derretimiento del “glaciar del fin del mundo”.