El Día de San Patricio está aquí y ya tenéis una excusa para salir con amigos. Os advertimos que los restaurantes hoy estarán a tope, así que mejor llegar temprano para conseguir un buen lugar. Ya os hemos comentado en dónde podréis encontrar la mejor música y celebración por Madrid. Ahora, os contamos un poco sobre el origen de esta fecha.
Y es que muy pocas personas conocen la verdadera historia detrás del Día de San Patricio. Lo importante es celebrar el día con una bebida en mano, pero, venga, al menos intentad conocer los orígenes de esta bonita tradición que se festeja cada año.
Origen del Día de San Patricio
San Patricio es el patrón de toda Irlanda, pero no siempre fue un santo. De hecho, a sus 16 años fue encerrado y llevado a Irlanda y luego lo vendieron a la isla. Más tarde, Patricius decidió seguir el camino de la religión y convertirse en sacerdote. El nacido en Gran Bretaña alrededor de 385 se terminó convirtiendo en obispo.
San Patricio es el patrón de toda Irlanda, pero no siempre fue un santo.
Por otro lado, Patricio intentó convertir a los irlandeses al catolicismo. Como esto no era una tarea muy fácil tuvo que explicar lo que era la Santísima Trinidad con un trébol y también fue quien introdujo las fogatas y cruces durante el festejo de las Pascuas, que hasta entonces no eran una fecha católica.
Por este motivo es que la festividad del Día de San Patricio se vincula con el trébol y el color verde. Esta era una planta originaria de Irlanda y por eso se usa en representación de su santo. Con respecto a la bebida, no se ha encontrado un motivo específico para ello durante esta fecha. Sin embargo, se sabe que comenzó en los años 80 con la creación de una cerveza verde.
Ya luego tenéis la leyenda del duende al final del arcoíris que, según el relato, tiene una olla repleta de monedas de oro. También se dice que aquellos que no estén vestidos de verde durante el Día de San Patricio son visibles para los duendes y, por ende, estarán a la merced de sus bromas. Venga, que estas criaturas suelen ser muy traviesas. Sea como sea, vestiros de verde y salid un rato. ¡Salud!