La ciudad de Luang Prabang, en Laos, es una joya que ha quedado varada en el tiempo. Aquellos que la han visitado expresan que parece ajena de todo el ruido de sus vecinos y aseguran que es tan tranquila como las mismas aguas del Mekong. Es el lugar ideal para hacer un retiro espiritual, hacer una escapada para pensar, meditar y recargar energías.
La magia de Luang Prabang es única. La ciudad se asemeja más a un oasis que otra cosa y el hecho de estar alejado de la sobrepoblación y vida nocturna no lo hace para nada menos atrapante (sino todo lo contrario).
¿En dónde está ubicada?
Laos se encuentra situado entre Tailandia, Vietnam, Camboya, Myanmar y China. "Luang Prabang, escondida en un pliegue del norte, fue la antigua capital del reino y hoy es su corazón histórico. Una adormilada ciudad protegida por la Unesco en la que el pulso se relaja hasta alcanzar casi un estado de gracia", expresan desde "Vanitatis".
"Luang Prabang, escondida en un pliegue del norte, fue la antigua capital del reino y hoy es su corazón histórico".
Tal vez, un poco de la magia y paz del lugar tiene que ver con que está rodeada de montañas. Además, Luang Prabang también posee una cocina privilegiada con vinos selectos, galerías de arte y hasta tiendas sofisticadas.
"Calles en cuadrícula, fachadas engalanadas con flores, mansiones antes ruinosas que hoy son restaurantes con encanto y hoteles boutique, todo en un conjunto armonioso e impecable, dirigido a un viajero exigente con el arte de la buena vida", informaron desde el medio mencionado anteriormente.
La paz de Luang Prabang
Probablemente, la espiritualidad que rodea la ciudad también ayuda muchísimo a este ambiente atemporal que rodea a Luang Prabang. Esto tiene que ver con "Tak Bat, el ritual milenario que acontece con las primeras luces del alba" y al cual muchos turistas asisten en cualquier época del año, ya que el mismo se realiza todos los días. Hay que recordar que en un momento, esta fue la ciudad de los mil templos.