Las mandarinas cuentan con un gran sabor aromático. Su origen genera dudas, aunque se sabe que han sido cultivadas durante siglos en China y su nombre radica en el color de las togas que utilizaban los altos gobernantes de la antigua China.
Los beneficios para la salud de las mandarinas son variados. Como pasa con otros cítricos como la naranja, el pomelo o el limón, la pulpa de la mandarina está compuesta por vesículas llenas de zumo que contiene vitamina C, flavonoides, betacaroteno y aceites esenciales.
Cómo afecta el consumo de mandarinas a los riñones
Las mandarinas son unos de los alimentos ricos en agua, algo que las transforma en diurética que contribuye al buen funcionamiento de los riñones. Pero también puede tener un efecto negativo para la salud renal. La mandarina contiene mucho potasio y los riñones no son capaces de sacar el exceso de este mineral.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, esto puede generar desde ritmos cardíacos fuera de lo común hasta el caso más extremo que sería un ataque al corazón. Por lo que las personas con problemas renales deben cuidarse del consumo de mandarinas por día.
Las personas con problemas renales deben cuidarse del consumo de mandarinas por día.
En el caso de las personas que no tienen inconvenientes renales, su consumo le aportan beneficios por su ácido cítrico. Este se suma al calcio en la orina y disminuye el riesgo de que se formen cristales o piedras renales. Su gran contenido en agua mantiene los riñones hidratados.
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