Como bien se sabe, el conflicto civil español dividió al país en dos frentes, desencadenando no solo conflictos armados, sino también una singular "lucha de las dos pesetas". En esta contienda monetaria, cada zona en conflicto emitió sus propios billetes, dando lugar a una fascinante historia que ha perdurado en el tiempo.
Según el estudio "El billete español en la edad contemporánea: mucho más que un medio de pago", los billetes de esta época son mucho más que simples medios de intercambio. Son testimonios vivos de un periodo tumultuoso en la historia española.
Entre estos tesoros monetarios destaca el billete de 100 pesetas de 1938, adornado con la imagen de la Dama de Elche. Este billete, de gran valor histórico y estético, puede alcanzar precios muy altos en subastas del mundo del coleccionismo, llegando a pagarse entre 15.000 y 20.000 euros.
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Otro de los billetes destacados es el billete que presenta el Alcázar de Toledo, emitido en 1936 con un valor nominal de 1000 pesetas. Aunque no alcanza las cifras astronómicas de la Dama de Elche, su rareza y valor histórico lo convierten en una pieza codiciada en el mercado de coleccionistas, con su precio de venta determinado por la dinámica de las subastas.
Pagan hasta 20.000 euros por uno de estos billetes.
Otro ejemplar valioso
Sumándose a esta lista de billetes considerados tesoros monetarios se encuentra el billete de 500 pesetas con la imagen de la Catedral de Santiago, emitido en 1938. Aunque su valor en el mercado es menor que el de la Dama de Elche o el Alcázar de Toledo, aún alcanza precios significativos, rondando los 1.200 euros en subastas especializadas.
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